En el 2012, David y Julie se casaron; después de haberse conocido en una citas a ciegas y enamorarse. Por 18 largos meses ellos intentaron tener un hijo; pero esto fue en vano. Por este motivo, la pareja de St. George, Utah, Estados Unidos, decidieron recurrir a los tratamientos de fertilidad.
En marzo de 2014, ellos le dieron la bienvenida a sus trillizos, dos de ellos eran gemelos idénticos raros. Sin embargo, ocurrió un obstáculo, los gemelos idénticos desarrollaron el síndrome de transfusión feto-fetal, mientras estos estaban en el útero. Este síndrome puede ser mortal; y lo que ocurre es que un bebé recibe más sangre, mientras que el otro no esta recibiendo la suficiente cantidad. Después de una cirugía exitosa a las 19 semanas de embarazo; Julie dio a luz. Dándole la bienvenida a Abraham, Brady y Christian, quienes nacieron tres meses antes, no obstante, estos crecieron saludables.
Cuando se adaptaron a su nueva vida como padres, David y Julie intentaron tener a otro bebé. Y, en esta ocasión si no lo podían concebir naturalmente, iban a iniciar un tratamiento de fertilidad.
Pero, a tan solo 7 meses de dar a luz a los trillizos, mientras Julie estaba realizando unas compras, sintió unas nauseas repentinas. Cuando esta llego al a casa, fue al baño y al realizarse una prueba esta dio positivo. Luego, se enteraron de que ella estaba esperando gemelos; y lo más emocionante fue que lo concibieron de manera natural.
Las gemelas, Emily y Eliza, nacieron el 18 de abril de 2015.