En toda su vida fue muy criticada; incluso por su familia; por tener tantos niños sin una figura paterna; sin embargo, a ella nunca le importo porque sabía que el amor que ella le ofrecía era suficiente para que ellos salgan adelante y no necesitarían nada más. Por sus decisiones, fue acusada de ególatra; ya que solo pensaba en sus necesidades y no en la de los pequeños que estaban en camino. Incluso, pensando de manera egoísta, dio a luz a cuatrillizos a sus 70 años.
Ella siempre fue una mujer que mantuvo la cabeza en alto; debido a que no necesitaba preocuparse por nadie para poder mantener a su gran familia.
La mayoría de edad para tener un hijo esta entre los 35 a los 40 años; pero en esta historia, Annegret Raunigk, demostró que eso no la limitaría, dando a luz a sus 70 años, y no solo un bebé, sino cuatro. A través de una cesárea ella tuvo 3 niños y una niña; pero tuvieron que permanecer cuatro meses en el hospital.
Annegret ya tenía 13 hijos; y no todos del mismo padre. Según dicen; ella era una mujer que realmente disfrutaba de la experiencia de la relación; por lo que nunca pudo mantener una relación estable, pero, al cumplir los 70 años, ella todavía quería sentir como era sostener a un bebé recién nacido que hubiera venido de ella.
Ella se realizó varios estudios para asegurarse de que su salud estuviera bien; y aunque los resultados fueron positivos; los doctores le aconsejaron que no se sometiera al proceso de fertilización, ya que por su edad, era algo peligroso tanto para ella como para el bebé. Incluso, muchas clínicas se negaron a realizarse dicho procedimiento, pero con la ayuda de su nieto de 25 años, quien fue el donador de esperma, ella pudo cumplir su sueño.
Al nacer, los bebés tuvieron que permanecer en una incubadora por una semana; y a dos de los niños le tuvieron que realizar una cirugía de emergencia, pero al final, todo salió bien.
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