La leucemia es una enfermedad que no discrimina. Puede afectar a cualquier persona sin importar la edad ni condición física. Este tipo de cáncer es uno de los más comunes y puede aparecer desde los primeros meses de vida hasta la edad madura.
Es un tipo de cáncer de la sangre que se origina o inicia en la médula ósea, el tejido blando que se encuentra en el centro de los huesos, el lugar de nuestro cuerpo donde se forman las células que producen la sangre que irriga todos nuestros órganos y que es vital para la vida.
La leucemia puede desarrollarse rápida o lentamente. Según estudios esta terrible enfermedad es un cáncer silencioso. Es decir, al inicio es muy difícil de darse cuenta que está en el cuerpo. Sin embargo podemos identificar los síntomas básicos. Por lo que hay que estar atentos a los cambios de aviso en nuestro cuerpo para saber detectarlo a tiempo.
A continuación, crearemos una lista de las señales que transmite el cuerpo al padecer de esta enfermedad.
Fiebre o escalofríos
Fatiga persistente, debilidad
Infecciones frecuentes o graves
Pérdida de peso sin proponértelo
Ganglios linfáticos inflamados, agrandamiento del hígado o del bazo
Tendencia al sangrado y a la formación de moretones
Sangrados nasales recurrentes
Pequeñas manchas rojas en la piel (petequia)
Sudoración excesiva, sobre todo por la noche
Dolor o sensibilidad en los huesos.
Nuestra recomendación es que si notas dos o más de estos síntomas de manera continua en tu cuerpo o en uno de tus familiares o personas cercanas es muy recomendable visitar cuanto antes el centro de salud de tu conveniencia. El medico te indicara los exámenes de lugar para comprobar que es lo que está provocando los mismos.
En caso de que sea esta terrible enfermedad, hay diferentes tratamientos que si son aplicados a tiempo puede lograr una recuperación total en el enfermo. Por eso es muy importante estar pendiente a los cambios que ocurren en el organismo. Muchas veces son señales de alarma de que algo no anda bien y hay que arreglarlo.