Para muchas personas, estar a dieta es disminuir tu ingesta de carbohidratos o saltarte alguna comida. Sin embargo la realidad es que una dieta correcta debe estar dividida en 5 comidas al día; (Desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena).
De esta manera vas a mantener tu nivel de energía estable durante todo el día. Evitando así llegar a tu próxima comida muriendo de hambre y logrando eliminar la ansiedad por completo con mayor eficacia.
Cuántas calorías debe tener una cena correcta?
La cena representa entre un 20-30% del aporte energético diario. Lo que significa que en una dieta de unas 1,500 Kcal al día, la cena debe tener entre 300 y 450 Kcal para ser balanceada.
Una pregunta muy usual es si los carbohidratos nocturnos engordan más de lo habitual. Y la respuesta es NO! no existe ningún estudio científico que sea capaz de demostrarlo. Por lo tanto esto solo es un mito que se ha esparcido de boca en boca sin datos verídicos.
De hecho existen varios estudios científicos que lo demuestran. Estos dicen que los hidratos de carbono más complejos son fundamentales en cualquier dieta equilibrada. Debido a que nos aportan la energía necesaria para que nuestro cuerpo funcione a su 100%.
Cabe destacar que sí es importante evitar la harina y los alimentos ultraprocesados, especialmente durante la noche. Siempre tomando en cuenta nuestro gasto energético para llevar un equilibrio entre las calorías que consumimos y las que gastamos.
¿Cómo debe estar compuesta una cena correctamente equilibrada?
Una dieta mediterránea suele ser perfecta porque suelen ser muy equilibradas. Por ejemplo, la siguiente dieta combina carbohidratos complejos (Como cereales, tubérculos o legumbres), verduras y hortalizas, con algunas proteínas tanto vegetales como animales.
Las porciones en que vamos a dividir nuestros alimentos será con el método de Harvard. Esta prestigiosa universidad ideó un sistema con una guía visual que nos permite entender cuánto espacio debe ocupar cada alimento en nuestro plato.
Recordando que es recomendable utilizar métodos de cocción que requieran poco o nada de aceites. Cocinar al vapor o a la plancha son opciones que te ayudarán a mantener un buen sabor y un bajo contenido calórico.