Los motivos que nos impiden perder peso pueden ser variados, aunque según el matrimonio Heller, uno de ellos puede ser la adicción a los hidratos de carbono. Para conseguir superarla, diseñaron un plan alimentario pensado para perder peso sin pasar hambre.
Aseguran que cuando el metabolismo funciona correctamente, nos sentimos saciadas después de comer, pero quien padece una adicción a los carbohidratos no consigue alcanzar esa sensación y le resulta más complicado dejar de comerlos.
Esto provocaría un exceso de insulina y por consiguiente bajadas repentinas de la glucosa en sangre. Los niveles de serotonina no serían suficientes para informar a nuestro cuerpo de que estamos saciados y, por tanto, continuaríamos comiendo estos hidratos de carbono sin llegar nunca a sentirnos satisfechas.
Por eso, lo que los Heller proponen es una dieta con un bajo contenido en hidratos de carbono pero que permite, una vez al día, darnos un capricho con ellos. Un consumo diario y controlado que ayudaría a aliviar la sensación de estrés y ansiedad, al saber que cada día tendremos la opción de consumir una ración.
Este antojo que podemos colmar de forma diaria tiene que cumplir con determinadas condiciones. Por ejemplo, la comida con ‘premio’ debe ser siempre la misma, por lo que si hemos decidido que sea la comida, siempre tendrá que ser en esa franja horaria. Deben pasar 24 horas entre una ingesta de hidratos y la siguiente.
Debe ser en cantidades razonables
No se trata de comer todo lo que podamos, sino de quitarnos el gusanillo y dejar que los hidratos no se conviertan en un problema. Además se espera que puedas tomarla en menos de una hora.
Será una comida equilibrada y nutritiva en la que mande el sentido común y en la que podemos incluir arroz, pasta, patatas, fruta, pan o dulces, pero en la que no pueden faltar tampoco verduras y proteínas.
Con la dieta Heller disminuyes la mayor parte de los carbohidratos para recuperar la sensación de saciedad, mientras tanto aumentas el consumo de proteínas, grasas y fibra. Aseguran que al haber menos insulina en la sangre, el cuerpo metaboliza antes la grasa y eso ayuda a adelgazar.
La alimentación en la dieta Heller
Propone tres comidas importantes al día, pero puedes tomar algún tentempié a media mañana y a media tarde, es importante beber unos dos litros de agua diarios y cumplir con las pautas que nos señala el matrimonio responsable de este plan alimenticio.
Por ejemplo, en el desayuno, lo indicado es tomar un café solo, con edulcorantes si se prefiere, y una tostada de pan integral. Tanto la comida como la cena suelen comenzar con una abundante ensalada de hoja verde, aliñada con aceite de oliva, limón o vinagre, y una ración de proteína, ya sea carne de vacuno, huevos o pescado.
Al ser baja en calorías y restrictiva en los alimentos podría ayudarnos a perder peso, pero también acarrear falta de nutrientes o problemas. Por ello, antes de intentar seguir la dieta Heller es recomendable consultar con nuestro médico o con un especialista para asegurarnos que nuestra salud no se pondrá en riesgo si decidimos llevarla a cabo.